Sorprendió a todos corriendo vestida de calle. Salió tarde
pero no paraba de remontar posiciones; en llano o pendiente cada vez más
corredores iban viendo su espalda. Encaró la recta final resoplando sobre el
grupo de cabeza. Cuando se llevó por delante la cinta de meta sacaba cinco
metros al segundo clasificado. El público se abalanzó sobre ella, que no paraba
de revolverse, tratando de alcanzar el portal y gritando: “¡Soltadme!¡No os voy
a dar ni una!¡Con lo que me ha costado conseguir uvas para todos!”.
Miguel Ángel Pegarz
cYBRGHOST
Relato
presentado, sin éxito, al concurso de la San Silvestre Salmantina.
Quiero agradecer públicamente a GRACIELA MARTÍNEZ y CHEMA GARCÍA que aunque no comentan, siembran "g+1" por muchas de las entradas. Gracias por leer.
ResponderEliminar¡Bien llevado!
ResponderEliminarGracias. Para el jurado no tuvo ni una oportunidad, todos los finalistas (buenos, no es de esos que dices de donde lo sacaron) iban por la realidad social.
Eliminar¿Ves como si se le puede pedir a los Reyes Magos?