Cuando éramos jóvenes nos
gustaba pasar el día fuera de casa: correr por los prados, bañarnos en la
laguna, cerrar los ojos y sentir el calor del sol secándonos el rostro.
Los chicos de hoy, cuando escuchan nuestras historias, nos
miran como si viniéramos de otra dimensión. Hay que entender que les suene
extraño, son otra generación. Lo cierto es que ha pasado mucho tiempo. Estamos
hablando de cuando se podía vivir en la superficie.
Miguel Ángel Pegarz
Cybrghost
Comentarios
Publicar un comentario
Si Alguien Tiene Algo Que Decir Que Hable Ahora...O Cuando Le de La Real Gana.