Allí, frente al espejo del baño, repasaba cada detalle. Bien afeitado, y eso que ponerse las gafas para apurar bien le hacía sentir ridículo. El traje de los domingos, o bueno, el traje, porque nunca tuvo otro, bien cepillado y sin una mancha. La corbata, que no recordaba la última vez que se la puso. Y un clavel en la solapa, que si recordaba la última vez que se lo puso, y la única, el día de su boda. A él le seguía pareciendo una mariconada, pero a las mujeres les gustan esas tonterías. Se sentía un poco estúpido. No tenía edad ya para temblarle las piernas si no era por la circulación o la artrosis. Y a los ochenta, los nudos en el estómago se deben a una digestión pesada o a la hernia de hiato. Pero ahí estaba él, frente al espejo del baño, arreglándose como si fuera su primera comunión, temblando como un flan y con un nudo en la boca del estómago. Cogió el bastón, pero en el último momento lo dejó contra la pared. Y enfiló la puerta, emocionado como un chiquillo. Cybrghost ...
Coincido absolutamente con el espíritu de tu micro/reflexión.
ResponderEliminarAbrazos, Cyber!
Es una lástima que haya tan pocas personas.
ResponderEliminarUn micro cargadito de esencia.
Besos mediterráneos.
Pues yo también, coincido de pleno.
ResponderEliminarSaludos
Plas, plas, plas. Sí, es una pena que no haya muchos por ahí
ResponderEliminarsaludillos
Estaría bien que hubiera una epidemia que inoculara este virus para ser persona...
ResponderEliminarBuena reflexión
Besitos
Dediquémonos a ser personas...Nos irá mejor.
ResponderEliminarBesos desde el aire
Si señor!!! Me encanta este micro reflexivo. Si es una pena que haya tan poca gente-persona.
ResponderEliminarAbrazos
Gracias todas por vuestros comentarios. No lo considero un microrrelato porque no cumple ninguna de sus reglas (incluida la de no cumplir reglas). Pero es una reflexión muy personal y muy ligada a mi, así que celebro vuestra buena acogida.
ResponderEliminarEs una buena micro reflexión Cyb., y es cierto hay pocas personas comprometidas consigo mismas.
ResponderEliminarSaludos
Vengo siguiendo una cadena de postales navideñas que inició Sara Lew, y tenía curiosidad por ver hasta dónde había llegado.
ResponderEliminarMe he parado en esta micro-reflexión porque 'ser persona' es el primer título que debiéramos obtener, y luego todos los demás. Muy bueno tu micro. Me quedo por aquí para conocer más de tu escritura y de tus inquietudes.
Te invito a conocer demispalabrasylasvuestras.blogspot.com
Un saludo
ÁNGELES:
ResponderEliminarGracias, me remito a lo ya dicho.
LAURA:
Trataré de seguirla un rato de estos pero tengo un poquillo de lío. Bienvenida y espero que te quedes mucho. Prometo echar un vistazo a tu blog pese a mi falta de tiempo.
Ni más, ni menos; es lo poco en lo que deberíamos cumplir y sin embargo nos cuesta un montón.
ResponderEliminarBlogsaludos
Ser persona es de las mejores cosas que se puede ser. Además es la base de otras muchas cosas.
ResponderEliminarMe gustó este texto.
Abrazo,
P
ADIVÍN:
ResponderEliminarYo procuro intentarlo y aún quedando muy lejos ya me miran muchas veces como un bicho raro.
PABLO:
Nada más que añadir, tu comentario es más rico que el texto. Me alegra mucho que te guste.
Me uno a esta cadena de personas que solicitan, tras leer tu micro, que haya más personas, empezando, claro está, por uno mismo. Me ha gustado este tirón de orejas que me has dado. Abrazos.
ResponderEliminartodos deberíamos dedicarnos a eso, tengamos o no vocación.
ResponderEliminarUna gran reflexión, Sr. Cybrghost
Un abrazo de un intento de persona
Octavius Bot