No era el
remordimiento lo que le impedía conciliar el sueño. No llevaría veinte años
en el oficio si tuviese remordimientos. Era todo el trabajo acumulado. No había
parado en el último mes y aún tenía faena acumulada. Y no es un trabajo en que
el cliente tolere retrasos. Tampoco la situación estaba para rechazar encargos,
nunca se sabe cómo vendrá el mes próximo. Pero necesitaba un receso, cada día
lo veía más claro. Y ayer había sido la gota que colmaba el vaso. Vale que no
formaba parte del encargo, que no le vio la cara, ni la ejecución. Pero era un
error, un inadmisible resquicio de conciencia. No debió permitir que escapara.
Aunque fuese un niño.
Miguel Ángel Pegarz
cYBRGHOST
Toca hacer frente a la decisión tomada ... Y sonreír, a ser posible.
ResponderEliminarPor ahí en alguna parte de la película "El Padrino", cuando niño que querían eliminarlo y una súplica de, "Es solo un niño" y la respuesta demoledora, "Pero crecerá y buscará venganza" [si es que recuerdo bien]
Pues ha sido un placer visitarte, saludos
Muchas gracias por leer y aún más por comentar.
EliminarSí, reconozco la frase del padrino que me dices.
Salud.
Migue muy buenos tus relatos sigue asi
ResponderEliminarMuchas gracias. Un besote.
EliminarSalud.