Escupí la sangre que me llenaba la boca para poder hablar.
- Dime al menos como te llamas. Un hombre merece saber quién
acaba con su vida.
- Rodolfo Ares Santos Mendoza. ¿Contento?
- ¿Quién te manda? ¿Escobar?
- No hermano, no me manda nadie, voy por mi cuenta.
- ¿Eres consciente que esto desencadenará una guerra?
- ¡Claro pendejo!. Por eso lo hago, yo vivo de esto.
Una detonación fue lo último que oí en mi vida.
cYBRGHOST
Este relato surgió del Taller de Escritura de la Casa de Las Conchas. Tema Mitología.
Me ha gustado mucho Cybrg esta revisión al dios Ares, que de seguro, anda haciendo de las suyas.
ResponderEliminarBesos desde el aire
Siempre, 21 siglos y no hemos aprendido.
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