Dos briks de leche, cuatro huevos y media hogaza de pan que podría utilizar como arma. Es todo lo que le quedaba a Marinya en la despensa. Acababa de ver medio tazón de leche cortada. Estaba guardada en la nevera, pero no sabría decir cuántas horas habría funcionado en los últimos días, pocas. Sacó el cajón de los cubiertos y comprobó que detrás quedaban ya pocos grivnas escondidos. Marinya respiró hondo. Su pelo, antes rubio, se veía gris, mezcla de canas y ceniza. Imposible lavarlo, no salía bastante agua. Tocaba salir. Marinya tenía pánico a salir. Tanto miedo que cuando sonaban las sirenas bajaba al trastero en vez de ir al refugio, a pesar de las visibles grietas en las paredes. Allí tenía un improvisado colchón de mantas entre las que escondía su pasaporte ruso. Vivía sola desde que comenzó la guerra. Su esposo, soldado, había sido movilizado hacia el sur. A estas alturas podría ser viuda y no saberlo. No le gustaba pensar en ello… y no podía evitarlo. Marinya rebuscó en
ESPACIO LIBRE DE POLÍTICA. Gracias por respetarlo.
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Carmen, Miguel Angel...¡FELIZ NAVIDAD para vosotros y que lo disfrutéis muchísimo!.
ResponderEliminarMe gusta mucho la frase de Khalil Gibran, ¡palpita la primavera en nuestros inviernos!.
Besos para tí Miguel Angel y un gran abrazo navideño.
¡Ojala!, porque creo que de eso también hay mucha crisis. y yo lucho cada día por no dejarme acogotar.
EliminarGracias.
Felices días Carmen y Cybrg!!! Preciosa postal, hermosas palabras
ResponderEliminarBesos desde el aire
Las palabras ya ves que no son mérito mío. por la foto gracias.
Eliminar¡Felices fiestas, Cybrghost!
ResponderEliminarBrindo por un futuro más feliz.
Abrazos,
Mis mejores deseos. Gracias
Eliminar¡Felices fiestas, Carmen y Cybr! Ciertas palabras las de Khalil Gibran. Por un 2013 donde no falten la inspiración y la esperanza.
ResponderEliminar¡Saludos van!
A mi me gustan. Mi lucha es que no me amarguen ni unos ni otros. Y es dura.
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